Cuida de tu cuerpo y tu mente. La salud en sí mismo es esencial para la buena vida y alcanzar sus metas y sueños.
¡Su mayor bien es su salud!
Escuchar y asimilar las penas de alguien que se encuentra en crisis, puede desequilibrar lo emocional y afectar el cuerpo.
Cuando asumimos “los sufrimientos de los demás, acabamos siempre, sin darnos cuenta, incorporándolos a nosotros mismos, y nuestra fuerza se puede transformar en un abismo de flaqueza.
No debemos hacer de nuestra mente “una esponja” que absorba todo tipo de problemas.
Debemos escuchar, pero con excepciones, para no herir nuestra inmunidad, de lo contrario no ayudaremos y podernos contraer el mismo mal.
La salud es prioritaria.
¡La salud es nuestra mayor riqueza!
Escuche, preocúpese y ayude a las personas, pero mantenga siempre su mente firme, intacta, equilibrada y reforzada con buenos pensamientos. Manténgala inmune a las crisis ajenas y viva una existencia alegre y saludable.
Tres reflexiones valiosas:
1. ¿Andas cabizbajo, sin esperanzas en el futuro? Alza la frente, revive tus ilusiones y hazlas realidad aquí y ahora. Pon manos a la obra y llévalas a cabo. ¡Conviértete en el autor de algunas de las obras que más éxito reflejen en el mundo!
2. Si tropezaste pero todavía tienes fuerzas y no te sientes derrotado, haz como el ave Fénix: renace de tus cenizas. Ponte de pie y sigue luchando por la victoria. ¡La vida sigue, y siempre te dará una nova oportunidad!
3. Mantén tu pensamiento positivo: “Lo voy a lograr, yo puedo”. Ve pétalos y no espinas en el camino que has de seguir. Hazte consciente de que la lucha es sólo un detalle para lograr tu gran objetivo: ¡la victoria!
Inácio Dantas
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